RECUERDOS DE TI

 

Escribiré mil palabras que son para ti,
escribiré un canto corto al silencio y
derramaré de tu amor esos exhalos de tus suspiros contenidos.

 

Voy a cantarlo sin llorar al escribirlos
voy a gritarlo sin sonido alguno, aunque exista razón para hacerlo,
evitaré ese lamento profundo para no llenar mi atardecer de pesar.

 

Recordaré de aquellos tiernos momentos cuando todo era una alegría,
de todo cuanto hicimos ambos para estar a la par,

de saber y no saber que hacer al mismo tiempo,
sobre lo prohibido y lo permitido que buscamos sin darnos cuenta.

 

Voy a hacer una fogata en mi soledad por tu ausencia

voy a prender tu nombre en fuego para sentir tu calor

y  calar en lo profundo de mis ideales para hallar razón y respuesta,
o para cubrir la desnudez de tu inocencia y vestirlos con el fino saber del discernimiento.

 

Volver el tiempo tan solo un segundo es el sueño que me embarga,
es la esperanza que me anima a seguir,
es mi sueño de volar como en ensueño hasta donde te encuentres,
atravesando la amargura de nuestros corazones hasta encontrarle lo dulce que se ha perdido.

 

Recuerdo esta frase célebre: “Pero un día se irá de casa
y en sus cosas llevará un pedazo de mi vida que jamás regresará,

mientras tanto quiero darle tantas cosas,
quiero darle tanto amor, tanta atención y enseñarla cada día su importancia y su valor,

quiero cuidarla el corazón”.

Que tan rápido voló el tiempo que ahora estoy recordando lo que en el ayer era el futuro.

Me estruja el alma en el cuerpo por no cumplir con muchas promesas,
por no llevarla a lugares que un día quiso conocer,
el tiempo fue adverso o no comprendí que ese tiempo pasa y el día menos esperado llega.

 

Que seas mi universo, que seas todo lo que siento y lo que pienso,
que seas el primer aliento en la mañana y

la luz de mi ventana cuando se apague el último farol de mi cielo. 

 

Sé la luz del mundo cuando el sol se oculta,

Sé, la que brilla como reflejos de estrellas en las gélidas noches

adornando el silencioso caminar bajo esa luna llena.

 

Se apaga el mundo cuando el sol se va,

con nostalgia inunda de sombra sus pasos, se acrecienta la fría soledad de otoño,

mientras ruego quietud para mi alma, libertad para mis silencios,

larga vida para mis esperanzas.

 Y el mejor destino para tus pasos...!